Dormir con ventilador, ¿Es recomendable?
Llega el ansiado verano y con él esas noches de calor y vueltas interminables en la cama debido al calor. Una solución muy común para paliar el calor por las noches en verano es colocar un ventilador de techo o de pie en el dormitorio para que les ayude a dormir mejor y a estar más frescos por la noche.
Se ha comprobado que existen contraindicaciones para el aire acondicionado, y que algunas personas están a favor y otras en contra de su uso por la noche.
Sin embargo, el aire acondicionado es un poco diferente porque mantiene la habitación fresca durante un tiempo, mientras que con un ventilador sólo tienes que encenderlo durante el tiempo que quieras.
Problemas derivados de dormir con un ventilador
Pero dormir con un ventilador en la habitación tiene algunas contraindicaciones como las que te contamos a continuación.
- El ventilador desplaza el polvo y el polen presentes en la habitación, por lo que no es recomendable, sobre todo para las personas alérgicas.
- Dormir con un ventilador provoca un flujo de aire ininterrumpido, que reseca la piel y las fosas nasales. Esto puede hacer que la mucosidad compense la sequedad y los dolores de cabeza debidos a la congestión nasal.
- La sequedad de las fosas nasales facilita la entrada de gérmenes.
- La tensión muscular constante puede provocar rigidez muscular. Dormir con un ventilador en la cara aumenta este riesgo.
- Dormir con los ojos y la boca entreabiertos puede hacer que el aire de ventilación entre en los ojos y se reseque la garganta.
- Dormir con un ventilador puesto puede provocar problemas respiratorios como asma o sinusitis.
¿Cómo puedo minimizar los riesgos de dormir con el ventilador?
Si quieres dormir con un ventilador en la habitación debes tener la precaución de limpiar el polvo de la habitación y el polvo del propio ventilador, y el interior debe mantenerse limpio para minimizar la migración del polvo.
La velocidad y la distancia del ventilador determinan el grado de los efectos sobre la salud: puedes evitar la congestión nasal, los dolores de cabeza, el dolor muscular y la sequedad de ojos.
Los filtros de aire de las habitaciones pueden reducir la circulación de alérgenos como los ácaros del polvo y las esporas. Las personas propensas a las alergias pueden beneficiarse de su uso.
Si el ventilador tiene giro automático, usarlo por la noche evitará el viento constante en una dirección. Un aire más fresco y uniforme puede evitar la rigidez de hombros, los dolores musculares y la sequedad de nariz, boca y ojos.
Algunos ventiladores tienen un temporizador. Se recomienda para las personas que se quedan dormidas sin acordarse de apagar el ventilador. Se puede programar un temporizador en el ventilador para que se apague una o dos horas después de acostarse en el colchón.
Si el ventilador está a, al menos a metro y medio de distancia, es menos susceptible de recibir una corriente de aire concentrada. Si duermes con el ventilador encendido, mantenlo a una velocidad moderada para evitar recibir el flujo de aire tan de lleno.