FINANCIA TU COMPRA HASTA 12 MESES SIN INTERESES
Home

Colchones s de 15 cm en outlet

En La Tienda HOME encontrarás colchones s de 15 cm de altura, revisados para ofrecer confort y un gran ahorro.
Ordenar por:
Filtros (2)
Outlet - Colchón Viscosensitive One de HOME - principal
Outlet reacondicionado
Altura:
15 cm
Firmeza:

Outlet - Colchón Viscosensitive One de HOME

5
(13)
99,99€Cuota 12 meses: 8,33€
70% dto.
Queda 1 unidad

Entrega gratis en 3 a 5 días laborables de lunes a viernes

Ver producto

Los plazos se indican para Madrid. En las fichas podrás ver el plazo exacto indicando el código postal de tu domicilio.

Más información acerca de Colchones

¿Qué colchón necesitas?

Elegir un colchón no es una decisión que debas tomar a la ligera. Pasamos aproximadamente un tercio de nuestra vida durmiendo, por lo que contar con un colchón adecuado afecta directamente a nuestra salud física y mental.

La elección del colchón perfecto depende de múltiples factores personales: tus preferencias de firmeza, tu postura al dormir, si padeces dolores musculares o articulares, e incluso tu tendencia a sentir calor durante la noche. Un colchón que se adapta correctamente a tu cuerpo puede marcar la diferencia entre despertarte descansado o con molestias.

Además, debes considerar aspectos como el espacio disponible en tu dormitorio, si compartes cama con otra persona, y por supuesto, tu presupuesto. La Tienda HOME ofrece una amplia variedad de opciones para satisfacer todas las necesidades y bolsillos.

¿Por qué es importante elegir bien tu colchón?

La calidad del sueño repercute directamente en nuestra salud. Un colchón inadecuado puede provocar insomnio, dolores musculares crónicos y fatiga acumulada que afecta a nuestro rendimiento diario. Durante el sueño, nuestro cuerpo se recupera y regenera, por lo que dormir en una superficie que no proporciona el soporte adecuado impide que este proceso se realice correctamente.

Por otro lado, un buen colchón contribuye a mantener la columna vertebral alineada mientras dormimos, previniendo dolores de espalda y cuello. También ayuda a distribuir el peso corporal de manera uniforme, reduciendo los puntos de presión que provocan molestias y cambios frecuentes de postura durante la noche.

Sin duda, invertir en un colchón de calidad es invertir en salud. Si calculamos el coste diario durante sus años de vida útil, descubriremos que es una de las inversiones más rentables para nuestro bienestar.

Cómo saber si necesitas cambiar de colchón

Los colchones no duran para siempre. Incluso los modelos de mayor calidad van perdiendo sus propiedades con el paso del tiempo. Existen señales claras que indican que ha llegado el momento de renovar:

Si al despertar sientes dolores que desaparecen al levantarte y estirar el cuerpo, probablemente tu colchón ya no te proporciona el soporte adecuado. También debes prestar atención a los hundimientos visibles o la sensación de que "te hundes" demasiado en ciertas zonas del colchón.

El ruido de muelles al moverte, un deterioro visible de la tela o la aparición de manchas de humedad son otras señales inequívocas. En general, si notas que duermes mejor en otras camas (como en hoteles o en casa de amigos) que en la tuya propia, es hora de plantearse un cambio.

Como norma general, los expertos recomiendan renovar el colchón cada 8-10 años, aunque este periodo puede variar según la calidad del producto, el uso que se le dé y cómo se mantenga.

¿Qué firmeza de colchón es la mejor para ti?

La firmeza ideal de un colchón varía según factores como tu peso, postura habitual al dormir y preferencias personales. No existe un colchón universalmente perfecto, sino aquel que mejor se adapta a tus necesidades específicas.

Colchones duros

Los colchones de firmeza alta o "duros" proporcionan un soporte sólido que mantiene la columna vertebral correctamente alineada. Esta característica los hace especialmente adecuados para personas con sobrepeso o que sufren dolores de espalda crónicos, ya que evitan hundimientos excesivos.

Las personas que duermen habitualmente boca abajo suelen beneficiarse de este tipo de firmeza, ya que un colchón más blando podría provocar una curvatura antinatural de la columna. Igualmente, quienes duermen boca arriba pueden encontrar en estos colchones el soporte necesario para mantener la zona lumbar en una posición saludable.

Es importante distinguir entre firmeza y dureza. Un buen colchón firme debe proporcionar soporte sin resultar incómodamente duro, permitiendo cierta adaptabilidad en las zonas donde es necesario aliviar la presión, como hombros y caderas.

Sin embargo, las personas con poco peso pueden percibir estos colchones como excesivamente duros, ya que su cuerpo no ejerce la presión suficiente para que el material ceda ligeramente y se adapte a sus curvas.

Colchones de firmeza media

Los colchones de firmeza media representan el equilibrio perfecto entre soporte y confort, adaptándose a una amplia variedad de usuarios y posturas. Esta versatilidad los convierte en la opción más popular y recomendada cuando el colchón va a ser utilizado por personas con diferentes preferencias o características físicas.

Para las personas que cambian frecuentemente de postura durante la noche, la firmeza media ofrece un compromiso ideal, facilitando los movimientos sin renunciar a la adaptabilidad. También resultan adecuados para quienes duermen de lado ocasionalmente, ya que proporcionan suficiente adaptabilidad para aliviar la presión en hombros y caderas.

Los colchones híbridos suelen ofrecer este tipo de firmeza, combinando capas de diferentes materiales para lograr un soporte progresivo que se percibe como "ni demasiado duro, ni demasiado blando".

Al elegir un colchón de firmeza media, es aconsejable prestar atención a la zonificación, es decir, áreas con diferentes grados de firmeza que se adaptan a las distintas partes del cuerpo según sus necesidades específicas de soporte.

Colchones blandos

Los colchones de firmeza baja o "blandos" se caracterizan por su gran adaptabilidad y efecto envolvente. Esta suavidad resulta ideal para personas de poco peso, ya que pueden hundirse lo suficiente en el material para que éste se adapte correctamente a sus curvas.

Quienes duermen habitualmente de lado encuentran en estos colchones un alivio para la presión que se genera en hombros y caderas, las zonas que soportan más peso en esta postura. La superficie más mullida permite que estas áreas se hundan ligeramente, manteniendo la columna vertebral correctamente alineada.

Muchos colchones viscoelásticos entran en esta categoría, ofreciendo esa sensación característica de "fundirse" con el colchón que muchos usuarios aprecian. No obstante, es importante elegir modelos que, pese a su suavidad, mantengan un soporte adecuado en las capas inferiores.

Por contra, las personas con sobrepeso deberían evitar los colchones excesivamente blandos, ya que no proporcionarán el soporte necesario y pueden provocar hundimientos que deriven en problemas posturales. Tampoco son recomendables para quienes duermen boca abajo, pues favorecen una curvatura excesiva de la columna.

Tipos de colchones

El mercado ofrece una gran variedad de colchones, cada uno con características que pueden adaptarse mejor a tus necesidades específicas. Conocer las diferencias entre ellos te ayudará a tomar una decisión informada.

Colchones de muelles ensacados

Los colchones de muelles ensacados representan una evolución de los tradicionales colchones de muelles. En este caso, cada muelle va envuelto individualmente en una bolsa de tela, permitiendo que trabajen de manera independiente. Esta tecnología proporciona un soporte localizado que se adapta a cada parte del cuerpo según su peso y forma.

Una de las grandes ventajas de estos colchones es su excelente ventilación, ya que el aire circula fácilmente entre los muelles. Esta característica los hace ideales para personas calurosas o para zonas de clima cálido.

Además, los colchones de muelles ensacados destacan por minimizar la transferencia de movimiento, lo que resulta perfecto para parejas. Si tu compañero de cama se mueve durante la noche, apenas lo notarás, pudiendo disfrutar de un sueño ininterrumpido.

Su durabilidad es otro punto a favor, especialmente en los modelos de gama alta que utilizan muelles de acero templado de alta calidad. Con un mantenimiento adecuado, estos colchones pueden mantener sus propiedades durante muchos años.

Colchones viscoelásticos

La viscoelástica es un material desarrollado originalmente por la NASA que revolucionó la industria del descanso. Este material tiene la capacidad de adaptarse a la presión y temperatura corporal, moldeándose perfectamente a las curvas del cuerpo y recuperando su forma original cuando se elimina la presión.

Los colchones viscoelásticos destacan por su capacidad para aliviar puntos de presión, distribuyendo el peso uniformemente. Esta propiedad los convierte en la elección ideal para personas con dolores articulares o musculares, ya que reducen la tensión en las zonas problemáticas.

Por otro lado, el efecto envolvente de la viscoelástica proporciona una sensación de ingravidez que muchos usuarios describen como "dormir en una nube". Sin embargo, este mismo efecto puede resultar incómodo para quienes prefieren sentir un soporte más firme o tienen dificultades para moverse en la cama.

Es importante tener en cuenta que los primeros modelos de viscoelástica tendían a retener calor, pero los avances tecnológicos han permitido desarrollar viscoelásticas termorregulables que mantienen una temperatura óptima durante toda la noche.

Colchones de espuma HR

La espuma de Alta Resiliencia (HR) destaca por su densidad superior y su capacidad de recuperación tras la compresión. Este material ofrece un soporte firme pero confortable, siendo una opción equilibrada para una amplia variedad de usuarios.

Los colchones de espuma HR proporcionan una excelente relación calidad-precio, combinando durabilidad y confort a un coste más accesible que otros materiales premium. Su estructura de célula abierta favorece la circulación del aire, evitando la acumulación de humedad y calor.

Otra ventaja significativa es su ligereza, lo que facilita la tarea de hacer la cama o girar el colchón periódicamente para garantizar un desgaste uniforme. Además, la espuma HR es hipoalergénica, convirtiéndose en una alternativa segura para personas con alergias o problemas respiratorios.

Sin embargo, los colchones de menor densidad pueden perder sus propiedades más rápidamente, por lo que es recomendable elegir modelos con una densidad mínima de 30 kg/m³ para garantizar una durabilidad adecuada.

Colchones de látex

El látex es un material natural extraído del árbol del caucho, aunque también existe una versión sintética con propiedades similares. Los colchones de látex destacan por su extraordinaria elasticidad y capacidad de adaptación, ofreciendo un soporte progresivo que combina firmeza y suavidad.

Una de las características más valoradas del látex es su durabilidad excepcional, pudiendo mantener sus propiedades intactas durante más de 15 años con un cuidado adecuado. Esta longevidad los convierte en una inversión a largo plazo que compensa su precio inicial más elevado.

Desde el punto de vista higiénico, el látex natural posee propiedades antibacterianas y antifúngicas inherentes que lo hacen resistente a ácaros y otros microorganismos. Esta cualidad resulta especialmente beneficiosa para personas con alergias o asma.

Por otro lado, la estructura microcelular del látex permite una ventilación óptima, regulando la temperatura y evitando la acumulación de humedad. No obstante, es importante señalar que son relativamente pesados, lo que puede dificultar su manipulación al hacer la cama o cambiar las sábanas.

Colchones híbridos (muelles + visco, etc.)

Los colchones híbridos representan la vanguardia en tecnología del descanso, combinando lo mejor de diferentes materiales para maximizar sus beneficios y minimizar sus inconvenientes. Típicamente, constan de un núcleo de muelles ensacados que proporciona soporte y transpirabilidad, complementado con capas superiores de viscoelástica, látex o espuma HR que aportan confort y adaptabilidad.

Esta combinación estratégica de materiales permite disfrutar de un soporte progresivo: firme en las zonas donde se necesita estabilidad y suave en los puntos de mayor presión. El resultado es una superficie de descanso que se adapta perfectamente a cualquier morfología corporal.

Los colchones híbridos también destacan por su excelente ventilación, ya que el núcleo de muelles facilita la circulación del aire, mientras que las capas superiores de confort pueden incorporar tecnologías termorreguladoras que disipan el calor.

Aunque suelen situarse en un rango de precio intermedio-alto, su versatilidad los convierte en una opción muy recomendable para quienes no tienen claras sus preferencias o buscan un colchón que satisfaga las necesidades de diferentes usuarios.

Colchones según perfil de usuario

Las necesidades de descanso varían enormemente según las características físicas, edad y condiciones específicas de cada persona. Elegir un colchón adaptado a tu perfil particular puede marcar la diferencia entre un sueño reparador y noches de incomodidad.

Colchones para personas con dolor de espalda

Las personas que sufren dolores de espalda requieren colchones que proporcionen un soporte adecuado para mantener la columna vertebral en posición neutra durante toda la noche. La firmeza óptima dependerá del tipo específico de dolencia y la zona afectada.

Para dolores lumbares, generalmente se recomiendan colchones de firmeza media-alta que eviten el hundimiento excesivo de la zona pélvica. Los colchones con tecnología de muelles ensacados o núcleos de látex suelen ofrecer ese soporte progresivo que combina firmeza con cierta adaptabilidad.

En el caso de dolores cervicales, es fundamental que el colchón permita una correcta alineación del cuello con el resto de la columna. Los modelos viscoelásticos de densidad media-alta o los híbridos con capas superiores adaptables resultan especialmente beneficiosos, complementados con una almohada adecuada.

Colchones para niños

Los colchones infantiles deben priorizar el correcto desarrollo óseo y muscular de los más pequeños. Durante la etapa de crecimiento, es esencial proporcionar un soporte firme pero confortable que favorezca la correcta formación de la columna vertebral.

Para niños menores de 10 años, se recomiendan colchones de firmeza media-alta con materiales transpirables como HR de alta densidad o combinaciones de muelles con capas de confort hipoalergénicas. Estos ofrecen el equilibrio perfecto entre soporte y adaptabilidad para cuerpos en desarrollo.

La higiene es otro factor crucial en colchones infantiles. Opciones con fundas desenfundables y lavables o tratamientos antiácaros y antibacterianos son altamente recomendables, especialmente para niños con alergias o asma. Algunos modelos incorporan protecciones impermeables discretas para gestionar posibles accidentes nocturnos.

A medida que los niños crecen, especialmente durante la adolescencia, es importante considerar colchones con una vida útil prolongada que puedan adaptarse a los cambios físicos rápidos característicos de esta etapa. Los modelos reversibles con diferentes grados de firmeza por cada cara pueden resultar una inversión inteligente.

Colchones para parejas

Dormir en pareja plantea el desafío de satisfacer dos conjuntos diferentes de preferencias y necesidades. La clave está en encontrar un colchón que ofrezca un buen compromiso o soluciones específicas para esta situación.

La independencia de lechos es una característica fundamental, ya que permite que los movimientos de una persona no perturben el descanso de su acompañante. Los colchones de muelles ensacados, viscoelásticos de alta densidad o híbridos suelen destacar en este aspecto, minimizando la transferencia de movimiento.

Para parejas con diferencias significativas de peso, los colchones zonificados proporcionan un soporte adaptado a cada lado. Otra alternativa cada vez más popular son los sistemas personalizables que permiten elegir diferente firmeza para cada mitad del colchón, manteniendo una superficie uniforme.

La regulación térmica también adquiere mayor importancia cuando dos personas comparten cama. Los materiales termorreguladores, como viscoelásticas de última generación con gel refrescante o fundas con tratamientos específicos, ayudan a mantener una temperatura óptima durante toda la noche.

Colchones para personas con sobrepeso

Las personas con un peso superior a la media necesitan colchones específicamente diseñados para proporcionar un soporte reforzado que evite hundimientos excesivos y garantice la correcta alineación de la columna vertebral durante el descanso.

La densidad de los materiales es un factor crítico en estos casos. Para viscoelásticas, se recomiendan densidades superiores a 60 kg/m³, mientras que en espumas HR no deberían ser inferiores a 35 kg/m³. Estas densidades elevadas aseguran que el colchón mantendrá sus propiedades a largo plazo incluso bajo presión constante.

Los sistemas de muelles ensacados reforzados, con mayor número de muelles por metro cuadrado y mayor grosor de hilo en el acero, ofrecen una combinación ideal de soporte y durabilidad. Muchos fabricantes desarrollan líneas específicas que pueden soportar pesos de hasta 130-150 kg por persona sin comprometer la comodidad o la vida útil.

El grosor total del colchón también debe ser considerado, recomendándose modelos de al menos 25-28 cm para personas con sobrepeso. Este mayor volumen permite incorporar capas de soporte reforzadas sin renunciar a las capas superiores de confort que garantizan una superficie agradable.

Colchones para personas calurosas

La sensación de calor excesivo durante el sueño es una de las principales causas de despertares nocturnos y descanso interrumpido. Las personas que tienden a acumular calor necesitan colchones específicamente diseñados para favorecer la ventilación y disipar la temperatura corporal.

Los colchones de muelles, tanto tradicionales como ensacados, destacan por su excelente circulación de aire entre los núcleos metálicos, lo que facilita la evacuación del calor y la humedad. Los modelos híbridos que combinan bases de muelles con finas capas superiores transpirables ofrecen un equilibrio perfecto entre frescor y confort.

Las tecnologías de regulación térmica han evolucionado significativamente en los últimos años. Materiales como el gel refrescante integrado en las capas de viscoelástica o los tejidos con PCM (materiales de cambio de fase) absorben el exceso de calor y lo liberan cuando la temperatura desciende, manteniendo un equilibrio constante.

Igualmente importantes son las fundas exteriores, que idealmente deben incluir fibras naturales como algodón o tencel, conocidas por su transpirabilidad. Algunos fabricantes incorporan tratamientos termorreguladores en el propio tejido o diseños tridimensionales que crean canales de ventilación para maximizar el flujo de aire.

Todos los colchonesColchones en StockColchones Top VentasColchones OutletColchones ReacondicionadosColchones ViscoelásticosColchones de muelles ensacadosColchones de látexColchones PikolinColchones Bultex

Nuestros clientes opinan

Información:

¿Desea que le ayudemos en su elección?

Envíenos su consulta a través del siguiente formulario de contacto

Entrega

Ver plazos de entrega según tu ubicación

Información del descanso

Lee nuestros artículos para informarte de las últimas novedades en descanso

Opiniones

Leer opiniones de otros usuarios sobre Colchones en La Tienda Home

Apariciones en medios

Lee noticias donde hablan sobre nosotros y nuestro trabajo