Guardar alfombras en verano: consejos prácticos para protegerlas y mantener un hogar fresco
Con la llegada del calor, muchas personas deciden guardar las alfombras hasta la próxima temporada de frío. Y aunque no siempre es necesario (especialmente en el caso de las alfombras de lana, que son termorreguladoras), hacerlo correctamente es importante para conservarlas en buen estado.
Además, un hogar más fresco y ligero en verano favorece la sensación de confort y descanso, tanto en el salón como en el dormitorio.
¿Qué alfombras conviene guardar en verano?
Alfombras de lana: no es obligatorio retirarlas, ya que son termorreguladoras. Aportan calor en invierno, pero en verano pueden resultar frescas al tacto, como ocurría en las jaimas del desierto.
Alfombras acrílicas o sintéticas: sí conviene guardarlas, ya que tienden a retener más calor y pueden resultar incómodas en épocas de altas temperaturas.
Consejos para guardar alfombras correctamente
1. Limpieza previa
Antes de guardarla, asegúrate de limpiarla en profundidad. Aspírala o lávala según el tipo de tejido.
2. Enrollar, nunca doblar
Doblar la alfombra deja marcas permanentes e incluso puede romper las fibras. Siempre guárdala enrollada.
3. Protección contra insectos
Coloca bolas de naftalina o productos antipolillas, especialmente en alfombras de fibras naturales. Incluso en las sintéticas conviene, ya que la base suele ser de yute.
4. Espacio seco y ventilado
El lugar de almacenamiento debe estar limpio, seco y sin humedad, para evitar moho y deterioro.
5. Cubrir la alfombra
Envuelve la alfombra en una sábana o funda transpirable. Añade bolsas desecantes (sílice) para absorber posibles restos de humedad.
¿Dónde guardar las alfombras en casa?
Bajo la cama: si está bien enrollada y protegida, es un sitio práctico.
En armarios altos o trasteros: siempre que no haya humedad.
En fundas especiales de almacenamiento: ideales para largas temporadas.
De esta forma, liberas espacio en el salón o dormitorio, creando un entorno más fresco y despejado para disfrutar del verano.
Orden y descanso: dos aliados en verano
Un hogar ordenado y adaptado a cada estación influye directamente en tu bienestar. Retirar alfombras pesadas, ventilar bien y elegir textiles más frescos (sábanas de algodón, fundas ligeras, cojines transpirables) son pequeños cambios que transforman el ambiente y hacen que tu descanso sea más reparador.
Además, si cuentas con un buen colchón y textiles adecuados, disfrutarás de noches más frescas y de mejor calidad de sueño.
Conclusión
Guardar las alfombras en verano no solo ayuda a conservarlas en perfecto estado, sino que también contribuye a tener un hogar más fresco, limpio y ordenado. Con estos sencillos pasos, podrás protegerlas durante los meses de calor y recuperarlas intactas cuando llegue el frío.