Decoración de salones, trucos y consejos para tener un salón de ensueño

La decoración de salones es algo muy importante pues en todas las casas es una de las estancias en las que más tiempo vamos a pasar y en la que se recibe a las visitas cuando van a vernos, de forma que la impresión que se llevarán de casa será la del salón y no otra.

Por eso, conviene dedicar algo de tiempo a planificar cómo lo vamos a decorar por primera vez o a la hora de hacer un cambio si no estamos contentos con lo que hay en este momento.

Lo primero es saber el espacio que tenemos

Ahora mismo lo normal es vivir en una casa no demasiado grande. Se puede decir que un hogar promedio tiene alrededor de 90-100 metros, que suelen ser menos en muchas ciudades.

De esta manera, antes de ponernos con la decoración hay que medir bien el espacio disponible para no llevarnos sorpresas a la hora de comprar los muebles, y sobre todo con el fin de no tener uno de esos salones en los que no podemos movernos sin tirar nada.

El sofá es el punto central

En la decoración de salones el sofá tiene que ser el punto central. No hay que olvidar que dentro de casa es el segundo lugar en el que más tiempo vamos a pasar después de la cama, así que habrá que escogerlo con calma, mirando mucho los modelos que hay en el mercado y el tamaño en relación con los metros de nuestro salón.

Además de que sea muy cómodo hay que centrarse en el color, pues aunque en un principio puede no parecer importante sí que lo será en cuanto lo instalemos.

Se trata de que cuando estamos descansando en el sofá de casa nos relajemos y nos olvidemos de todo, por lo que es mejor escoger colores neutros que siempre combinan, dan sensación de armonía.

Si el salón no es muy grande, que hoy en día es lo normal, pintar las paredes de tonos claros y elegir un sofá a juego puede ayudar a dar una mayor sensación de amplitud, a no sentirnos tan encerrados como con los tonos oscuros.

El tono de color, por si nos aburre tanto claro o neutro, se lo podemos dar con unos cojines de colores más atrevidos o incluso estampados. Tampoco debemos olvidar que una funda puede dar el color que necesitemos en ese momento y que en invierno, las mantas son otro elemento decorativo que ayudará a poner una nota distinta.

Decoración salones

Podemos comprarlos con almacenaje

Con la decoración de salones debemos partir del sofá y luego empezar a colocar piezas alrededor y en función del espacio disponible.

Existe un truco, cuando el salón es pequeño, es comprar sofás chaise longue con arcón. Este tipo de mueble tiene espacios debajo de los asientos, que se levantan para dejar grandes zonas en las que guardar mantas, fundas, cojines, ropa o incluso libros.

Las plantas ayudan a dar un tono distinto a nuestro salón

La vida en las ciudades es la norma y en ellas la naturaleza no abunda. Para verla hay que acudir a parques de manera que una buena idea es meter la vegetación en el salón.

Podemos colocar algunas plantas de interior, tanto colgantes, como encima de la mesa o en grandes macetas en el suelo, todo dependiendo de los metros que tengamos. Si el salón es pequeño tendremos bastante con una planta, mientras que si es grande podemos poner varias.

Eso sí, siempre es mejor no colocar ninguna a escoger una de plástico que da una sensación horrible.

Hay que huir de los salones barrocos

A veces, sobre todo cuando observamos la decoración de salones más antiguos, sentimos una sensación de opresión porque es imposible moverse. Acceder al sofá sin tirar un jarrón o una estatuilla es toda una proeza y eso no lo queremos para nuestra vivienda.

Siempre es mejor una decoración sencilla, que deje espacio para movernos con comodidad y para que los niños puedan jugar sin temor a sufrir un accidente cuando un jarrón les dé en la cabeza.

Un salón sencillo y ordenado, con los elementos decorativos justos, nos ayudará a encontrarnos más cómodos y sobre todo a limpiar, pues cuando planeamos la decoración nunca hay que olvidar que habrá que limpiarlo muy a menudo.

Si quieres cambiar la decoración no tienes que sustituir los muebles

Cada vez estamos más concienciados con el medio ambiente y una de las mejores maneras de cuidarlo es mediante el reciclaje.

Para ello, nada mejor que usar los mismos muebles si queremos modificar la decoración del salón (siempre que no estén rotos), pero cambiando su aspecto por completo.

Fundas o una nueva tapicería para el sofá

Ya sabemos que el sofá es la parte central del salón y cambiar su aspecto es tan sencillo como comprar una funda de sofá de calidad de un color que vaya acorde con la nueva decoración. Si el presupuesto que tenemos es mayor o la tapicería ya está deteriorada podemos retapizarlo con la idea de que parezca nuevo.

Vinilos para muebles

Una mesa de madera puede tener un aspecto añejo que no va con el nuevo estilo que queremos que tenga el salón, de forma que la podemos cambiar por completo sin necesidad comprar una.

Los vinilos serán nuestros aliados, pudiendo escoger entre decenas de acabados, colores e incluso dibujos para crear una mesa única que solo tendremos nosotros en nuestra casa.

También podemos pintar algunos muebles

Otra opción pasa por emplear la pintura para muebles como la mesa de centro, las sillas o incluso el mueble para la tele.

Acudiendo a las tiendas encontraremos imprimaciones y pinturas que sirven para cualquier tipo de madera y acabado, por lo que con un poco de dinero y una buena dosis de paciencia el salón quedará irreconocible sin la necesidad de invertir grandes cantidades y sin contaminar.

Si tenemos niños todo el proceso será más divertido y aunque los cambios no queden perfectos siempre tendremos la satisfacción de que los hemos hecho nosotros con nuestras propias manos.